la vida se lavaba en dos cuerpos
éramos el alma encogida ya
para verse la pureza,
qué inmensa custodia el sabernos
algo empezado,
nos saltaban las cicatrices
como pértigas humildes,
yo tendida en ti
como la última nieve
y tú descalzo de amar.
sólo nos quedaba desvestirnos
para hacer una resta
misteriosa,
dos cuerpos igual a uno
igual
a siempre
persistencia
dos cuerpos igual a menos que una muerte
a más que un amor.
éramos el alma encogida ya
para verse la pureza,
qué inmensa custodia el sabernos
algo empezado,
nos saltaban las cicatrices
como pértigas humildes,
yo tendida en ti
como la última nieve
y tú descalzo de amar.
sólo nos quedaba desvestirnos
para hacer una resta
misteriosa,
dos cuerpos igual a uno
igual
a siempre
persistencia
dos cuerpos igual a menos que una muerte
a más que un amor.
Gabriela Amorós Seller
+AUGUSTE+RODIN.jpg)
*Imagen: La Muerte de Adonis (1888) AUGUSTE RODIN
Inmensa Custodia by Gabriela Amorós Seller is licensed under a Creative Commons Reconocimiento-NoComercial-SinObraDerivada 3.0 Unported License.
"...yo tendida en ti/como la última nieve"
ResponderEliminarMe gusta tu forma de versar Gabriela.
Saludos